Conjugar, acción clave para enfocar los fondos de recuperación europeos
DEUSTO BUSINESS SCHOOL | 02/07/2021
Dra. Susana del Río Villar
Directora del Programa Integral Unión Europea de Deusto Business School
Ante la llegada de los fondos europeos, las empresas se preguntan qué enfoque deben hacer prevalecer. Tomar una estrategia de reactivación con la mirada en el corto plazo o emprender una senda que implique mayor transformación con mirada en el medio y largo plazo. La clave está en conjugar.
Los fondos de recuperación europeos Next Generation EU conllevan un engranaje económico que impulsa una “revolución” en la toma de decisión estratégica de las empresas. El Mecanismo de Recuperación y Resiliencia Europeo, en el marco de los Next Generation EU, implica reformular la visión de negocio empresarial desde todos los parámetros. El Plan de recuperación europeo constituye un hito en los logros de la Unión Europea que, al desplegarse y aterrizar en cada Estado miembro, provoca una reestructuración multinivel en todas las entidades.
Los ejes vectores prioritarios de la UE de nuestro tiempo, Pacto Verde Europeo y Digitalización, marcan dónde deben explorar las empresas para emprender la recuperación y la renovación de su tejido productivo sea de la índole que sea.
Es esencial que cada entidad empresarial identifique en sus fortalezas la capacidad de implementar factores que estén ensamblados a los ejes de acción de presente y de futuro de la UE. Además, es fundamental mantener, cuidar, guardar, lo que funciona y adaptarlo a una nueva etapa.
Los fondos de recuperación europeos pueden aplicarse a muchos de los ámbitos de trabajo y de negocio de gran número de empresas. Aquí es importante subrayar la necesidad por parte de la esfera empresarial de contar con información rigurosa sobre la aplicación de los fondos de recuperación europeos en Proyectos engarzados a los vectores UE marcados por la Comisión Europea. Las empresas deben solicitar información continua sobre los Next Generation EU, transparencia y colaboración público privada para poder decidir y planificar su estrategia empresarial. Las empresas deben realizar también un ejercicio de “auditoría” a las entidades gubernamentales, nacionales y locales, y a la Administración pública, tanto de la llegada de los fondos, como de su seguimiento.
Respecto a la dicotomía ante la decisión que señale hacia una reactivación rápida o hacia una transformación de fondo, con un horizonte a medio y largo plazo, la respuesta es Conjugar.
Seguramente las empresas identifican en su ADN, en su área principal de negocio, ejes a los que poder vincular los vectores de transición ecológica o de reforzamiento digital. Quizá ambos. Esta exploración interna de la propia empresa, sería un primer paso que reactivaría el negocio y, por tanto, la recuperación si la empresa se encuentra en una situación complicada o de supervivencia tras la pandemia. El coronavirus ha zarandeado la economía a todos los niveles y en todos los ámbitos. También hay que destacar que empresas de algunos sectores se han reinventado, han sabido adaptar sus modelos de negocio a esta nueva era y que incluso hay empresas que se han creado durante este tiempo tan complejo.
Retomando las líneas sobre la exposición de las decisiones, la primera fase en la reactivación conllevará una transformación de calado en la propia empresa.
Reactivación y Transformación deben considerarse dos conceptos, con sus acciones correspondientes, ligados a la llegada e inversión de los fondos de recuperación europeos. Es esencial sincronizar ambas capacidades, tomando decisiones con un enfoque coordinado. Reactivación y transformación deben ir de la mano. Conjugar es la clave para identificar y conservar lo que funciona y emprender el camino empresarial de una remodelación de negocio más profunda y, por tanto, sostenible en el tiempo.