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Crecimiento que pivota en el tirón exterior
La economía española crece el 3,8% (a/a) en IT23, mejorando el registro del trimestre anterior, destacando la aportación del sector exterior, que contribuye con 2,5pp al mismo, por la intensidad exportadora principalmente.
Pese a que la inflación sigue una traza descendente, aún no se han alcanzado el objetivo marcado por la autoridad monetaria. El IPC de marzo ha sido del 3,3%, tras descensos en la electricidad y los carburantes. Prosiguen la mejora del mercado de trabajo, a través de reducciones en las tasas de paro (13,3%) y avances en la ocupación.
La OCDE, prevé que el PIB de España pase del 2,1% en 2023 al 1,9% en 2024. Una inflación más baja y un mercado laboral resiliente respaldarán el consumo de los hogares. La mayor demanda externa sustentará al crecimiento de las exportaciones. Asimismo las mejoras perspectivas dinamizarán la inversión, pese a la subida de tipos de interés. El efecto esperado de los fondos europeos será un acicate para las inversiones públicas y el crecimiento. Se precisa continuar con mejoras en la productividad y reducir la dependencia de los combustibles fósiles de forma prioritaria.
Crecimiento positivo y moderándose
La economía vasca crece un 2,3% inteanual en el IT23, tasa inferior a la del trimestre precedente, manteniendo una posición intermedia respecto la Zona Euro (1,3%) y al Estado (3,8%). Con todo, el crecimiento ha sido ligeramente superior a lo esperado en el último avance de datos trimestral.
La menor demanda interna (1,8%) viene dada por la debilidad del consumo privado y de la inversión, afectados por el deterioro de la confianza, la inflación y la subida de tipos de interés derivada de una política monetaria restrictiva, entre otros. El sector exterior aporta en positivo al crecimiento, aunque de forma más moderada. Destaca el positivo comportamiento del mercado de trabajo, con reducción de la tasa de paro (8,7%) y aumento de la ocupación por encima del millón de empleados.
Las previsiones anticipan que el crecimiento flexionará al alza, una vez tocado suelo en torno al 1,5% en este ejercicio, con un avance esperado del 2,1% en 2024. Estos pronósticos sin embargo hay que inscribirlos en un entorno de elevada incertidumbre asociados al conflicto bélico derivado de la invasión de Ucrania y en sus repercusiones de toda índole, tanto en el entorno económico como social.